Ciencia Ficción

"Advertencia: Toda semejanza con la realidad es eso: la pura realidad, aunque paresca mentira. Sólo los nombres han sido cambiados para proteger a los inocentes."-LGO-

Vamos a suponer que la protagonista de esta historia se llama Brígida. Bueno, Brígida es una mujer bien separada de un Paco machista e infiel ( nótese que Paco es Carabinero, no el nombre de él sujeto en cuestión), al cual, como suele suceder, le entregó sus mejores años. Pero Brígida, buena madre, responsable, buena moza ( en realidad si fuera fea no influiría en la historia), en fin: jóven libre y audaz, había dedicado sus años pos separación al cuidado de su hija.

Resulta que Brígida se reencontró hace unos meses con un antiguo amor, el que recomenzó como una linda amistad. Pero como Brígida no es frígida, y la calenturta no tienen edad, estado civil ni ninguna burocracia, uno de esos fines de semana en que el Paco ( carabinero) se llevaba a su hija, el amigo pasó de rompe y raja a ser amigo con ventaja. Es decir, se mandó un buen polvo, gritó "viva chile" o como quieran llamarle al acto en cuestión.

Como mi amiga hace tiempo que se encontraba fuera de training, no ocupó condón, no tomaba pastillas ni ni una cosa. Sin embargo, ella muy informada, al otro día fue donde su médico a pedirle una receta del famoso POSTINOR-2, o píldora del día después, receta la que el profesional extendió sin ningún inconveniente. Ella salio feliz a la primera farmacia que encontro pero no sabia que....

AQUÍ COMIENZA EL TERROR

( Farmacia Humana, 18 horas despues de ocurrido el suceso )

Brígida: Buenas tardes señorita, me podría vender este medicamento, por favor ( extiende la famosa receta)

Farmaceútica: AHHH no señora, porque no tenemos en stock. Como se entán entregando gratuitamente en los consultorios, a nosostros ya no nos llega

Brígida : Plop!!

Cuento corto, lo mismo en la farmacia "Luz Verde", " SAlto" y todas las de este infierno chico que se llama Temuco.

La hora avanzaba, y cómo Brígida sabia que la pastilla pierde efecto con el paso del tiempo, se dirigió al consultorio más cercano:

Brígida: Buenas tardes señorita, vengo a solicitar la píldora del día después.

Encargada: ¿Para qué sería? ¿ Con qué propósito?

Brígida: Como que para que!!!.

(para no entrar en detalles y no columpiar aún más a la protagonista, no reproduciré esta parte de la historia)

Encargada: Bueno , deme su rut.

Brígida: 10. 43x.5xx-k

Encargada: Ummm, haber, haber...no, no se la podemos dar

Brígida : Por que!!!

Encargada: Por que usted figura en nuestros registros como una mujer casada, y solo la entregamos a mayores de edad que sean solteras.

Brígida: Cochetu....

(Y así en un consultorio, en otro, en otro y en el hospital)

Moraleja: En este pais, si eres casada, la pildora del día después es el Santo Grial. Osea, si te mandaste una merecida chasconeada, no hay nada que hacer. Tienes que apechugar si quedas esperando guagua, por que en el registro civil figuras como "Casada". A si sí que fomentamos el matrimonio no?, amarrandote las manos. Y así dicen que las mujeres hemos ganado terreno. Y así dicen que somos cada vez más "dueñas de nosotras mismas" (menos de nuestra sexualidad, eso aún está en manos del estado). Y eso que tenemos presidentA.

No se preocupen, como en Chile "el trabajo nada engendra, solo el pituto es fecundo", mi amiga Brígida se consiguió la dichosa pastillita, a través de la hermana de una amiga de una prima que trabajaba en el hospital.

Pero le quedó un susto terrible a:

1.-Volverse a casar algún día

2.- Pegarse una cana al aire sin protección

3.- A llamase "Frígida" después del numerito y la angustia.

Diganme: si esto no es un relato de ciencia ficción o un Triller. ¿Que es?.